Rafael Correa es un IDIOTA y los correistas también

Es risible, que una persona aparentemente tan inteligente, como es el Presidente de la República no se de cuenta que lo tienen embobado, que lo tienen fascinado con la idea de la revolución ciudadana, mientras 4 vivos se alzan con los dineros del estado, y hacen y deshacen chanchullos y picardías.

Es increible pensar que no se de cuenta que lo tienen engañado, mal asesorado, mal informado de la verdadera situación del Ecuador, y la cosa es grave. Como puede ser posible que se hayan festinado los dineros del estado aprovechando una declaratoria de emergencia para otorgar contratos a diestra y siniestra a los amiguitos de quienes entan en las altas esferas del gobierno.

Es inverosímil que a una persona que se supone inteligente sostenga a los cuatro vientos que estamos bien. Y que la revolución ciudadana está logrando justicia. ¿Cual justicia? Si lo único que se ha logrado es dividir aún más a las clases sociales, y que los pobres sean aún más pobres, dando como resultado seres que esperan un bono y no luchan por salir adelante, se está creando una sociedad paternalista, dependiente del estado, y acostumbrada a lloriquear para que "papá" Estado les de todo. Eso no es correcto, todos los ecuatorianos merecen vivienda, salud, servicios básicos de calidad, educación de excelencia, y seguridad, todo esto con una debida planificación, que fortalecería la economía mediante la creación de fuentes de trabajo en los proyectos de reconstrucción vial o de infraestructura pública, pero el gobierno de Correa lo único que hace es dar demagogia, ofrecen maravillas, pero lo único que ha conseguido lograr es apagones, incremento de la delincuencia, pésimo servicio en el seguro social, puentes que se caen, carreteras en mal estado, carestía de la vida, incremento de impuestos, etc.

Los seguidores de Correa también son idiotas, porque creen todas las tonteras que habla los días sábados en su enlace semanal, y defienden a capa y espada todas las tonteras cometidas. Están cegados, no abren los ojos, no se dan cuenta de la realidad. Estamos camino a un sistema que no funciona, un sistema obsoleto, que no sirve para competir, y que por el contrario lo único que hace es volver ricos a quienes están en el poder o lo comparten, eso la historia lo ha comprobado varias veces, pues en regímenes autoritarios como el nuestro, los gobernantes vivian en lujo total, mientras el pueblo se sumía en la más absoluta pobreza.

Se llenó la boca Correa diciendo que era un gobierno de manos limpias y de corazones ardientes, claro que es así, manos limpias para poder llenarlas de dinero y corazones ardientes de ambición.

Lo peor es que tenemos una asamblea de alzamanos, que no fiscaliza, que simplemente no hace nada por evitar que se lleven el dinero en la compra dolosa de helicópteros, ambulancias, medicamentos y otros escándalos muy sonados. Si así es la revolución ciudadana, prefiero a la partidocracia.